martes, 8 de junio de 2010

Uno solo



Si me echaras de menos me llamarías, me escribirías, entrarías en mi blog a escondidas pero sé que no lo haces. No me echas de menos, quizá añores la costumbre de hablarnos por teléfono o de las mañanas luminosas, pero no a mí. Hace tiempo que lo sabes y hace tiempo también que dejó de importarte. No sabría qué decirte, así, si te tuviera delante, no sabría qué hacer para que no te dieras cuenta de que sigo queriéndote.

Me molesta (al principio me enfurecía pero cada día que ha pasado he ido disminuyendo el temblor de mis dientes) que me hayas devuelto al extrarradio de donde vengo, que tú, muñequita, me hayas sustituido por la solución más fácil (es decir, por otro) y que intentes robarme la poca dignidad que me queda con un "quiero que seamos siendo amigos" y enumeras a los pobres bobos que accedieron a tenerte sin poder tenerte, a vivir una vida extraña de desearte sin deseo, a que la costumbre de estar a tu lado les apagara el ardor de la sangre.

Conmigo no va a pasar eso. Yo te voy a odiar hasta que se queme la vista de tanta ojeriza, no vas a encontrar en mí condescendencia. Tú crees que se me pasará y que dentro de unos días nos llamaremos o nos encontraremos casualmente en alguna comida de esas que organizan nuestros amigos comunes. Pero no se me va a pasar, muñequita, no me vas a domesticar como estás acostumbrada a hacer. No voy a pasar por donde tú quieres que pase.

Empieza a asumir que cuando elegiste, lo hiciste para siempre y que lo que entre tú y yo había, lo has roto definitivamente. Luego dirás que soy yo quien se aleja, ¿qué quieres? ¿que me quede a tu lado para cuando el otro no te comprenda? ¿para que tengas lo mejor de mí sin tener todo aquello que no deseas de mí?

No, muñequita, No soy dos, ni tres, ni cuatro personas. Soy uno solo. Uno solo para quedarse y uno solo para irse.

Y yo no sólo me he ido sino que ya he dejado de echarte de menos.

14 comentarios:

  1. Besos y sabes? brindo por ello, aunque te duela.

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  2. Si te digo que hace unos días me enviaron una carta prima-hermana-melliza de tu entrada de hoy...(aunque no me llamaban precisamente "muñequita").

    No sé Al, todo es/somos tan complejo/s..

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  3. Hécuba, a veces dos signos tuyos me llenan más que dos tomos de la enciclopédia británica. Espero que estés bien.

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  4. Adi, ¿sabes? Cuando alguie te dice el primer día: "Esto nuestro no va a ir a ninguna parte" no está expresando un miedo. Está hablando de un deseo, en realidad está comunicándote un objetivo estratégico.

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  5. Hoba, hay contactos que sin aparentarlo son dolorosos, como el borde del zapato contra el talón, como el papel de lija contra una pared decorada con un fresco antiguo.
    Se comete el error de pensar que el otro está ahí porque quiere ser nuestro amigo a pesar de nuestro desprecio, y digo desprecio porque le hemos rebajado lo que estamos dispuestos a pagar por tener a ese alguien a nuestro lado. Es cierto que al enamorarnos pagamos desorbitadamente por la fantasía. La realidad siempre es más barata... lo que más me cuesta siempre es asumir ese papel de saldo, de rebajas por defectuoso, de si lo cambio antes del día 20 seguro que me devuelven el dinero.

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  6. Hola, acabo de descubrirte gracias a Hoba W.
    Con tu permiso me quedo aquí leyéndote en silencio. Porque mira que hablo (escribo) por los codos, pero a veces, algunas veces, me pasa esa cosa tonta de quedarme sin palabras.

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  7. No hagas caso de todo lo que leas

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  8. Quizás estarás curado cuándo te sea totalmente indiferente, mucho me temo que mientras haya odio ó rencor ó cualquier otro sentimiento relacionado con las emociones, seguirás estando preso.
    Me gusta tu casa.
    Saludos.

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  9. Brindemos porque, sea amor u odio, nos hierva la sangre! Bienvenida

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  10. Alvarez, soy mujer de poca fe, así que no haré caso, valee ;) Pero sea realidad o ficción me gusta lo que cuentas y sobre todo como lo cuentas.

    Saludos!!!!

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  11. Elena, un hombre detrás de unas palabras no es más que un fantasma. Da igual si la sábana es de mejor o peor calidad. Dentro no hay nada que se pueda coger, levantas la tela y no queda nada.

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  12. no lo parece......la indiferencia es el final del amor, y no el odio

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  13. Hoy es 30 de Junio. Ya han pasado unos días desde que escribiste esto, y aún voy por esta entrada y me quedan varias por leer (estoy repasándome todo tu blog, sorry) pero me temo que no te lo crees ni tú.

    Eres de aquellos que tiene la mala costumbre de olvidarse de sí mismo para pensar en ella. La ella que te robe el corazón en el momento determinado. ¿Por qué no entendemos que la superviviencia tranquila es proporcional al grado de cabronazo que se pueda alcanzar?

    Es bonito calzarse los zapatos de otro, decir que te olvido, pero es una mentira. Una gran mentira como todo lo que nos rodea en ésta vida.

    Sigo leyéndote y no sé por qué por hacerlo, siento la necesidad de pedirte perdón.

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