miércoles, 16 de junio de 2010

El monsturo bajo el agua


Soy un mal bicho. Tengo la lengua venenosa, las zarpas de un oso, los dientes de un aligator. Quizá no soy siempre así, quizá sólo lo hago cuando me veo acorralado. He hecho mal las cosas, soy consciente de ello.


No soy un hombre que pueda vivir en compañía de otros hombres, no sé vivir en pareja, no soporto la presión de no ser quien quieren que sea. Soy como la gota de fairy que cae sobre la superficie del agua de lavar los platos.


Llamé a este blog El monsturo bajo el agua porque es lo que soy, un monstruo porque me siento herido, bajo el agua porque componen siete octavas partes de mi ser.


Doy por bueno todo lo que me pasa y admito que gran parte de todo lo que ha pasado lo he provocado yo. No soy víctima de nada ni de nadie que no sea yo mismo. No me voy a castigar por ello ni creo que el mundo me castigue.


Admito que estoy mejor acompañado pero también que los demás están mejor sin mí. A veces es mejor irse del todo, no quedarse a ver cómo todo se va a la mierda. A veces es mejor ser lo suficientemente egoísta como para no darle una segunda oportunidad a nadie.


Hoy me ha llamado. Sé que la hice sentir mal el otro día. Me jode ser un animal que hiere, ser ese monstruo que se despierta. Este blog, escondido a los ojos de ella, es posiblemente mi única buena acción en muchos años.


Puede que a veces te haga dudar, puede que en ocasiones te haga creer que soy hasta un tipo simpático. Entonces recuerda que existe un monstruo y un océano infinito donde esconderse. Recuerda Mr. Hyde tuvo un momento lúcido y te habló de que el Dr. Jekyll era sólo una cohartada.


Tengo el corazón enyesado, tengo el alma en venta.


19 comentarios:

  1. Esta es la única sinceridad que me gusta y que aprecio, aquella que habla de nosotros mismos. Porque es la única que suele tener consistencia en la verdad, en el conocimiento. La sinceridad que nos hace hablar de los demás, de malos modos, surge normalmente del resentimiento, de ese monstruo que presiona sobre los demás para que sean lo que esperamos que sean sin conseguirlo, por mucho que nosotros mismos no soportemos la presión de los demás.

    Esta sinceridad, la que nos transmites siempre es bien venida o por lo menos yo la doy por bien venida.

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  2. Lo mismo me equivoco Alvarez pero esa foto me hace pensar en góndolas, ¿me equivoco?.

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  3. Esta bitácora, Amaranta, es un diario a voces (pero a sabiendas que lo leerán y me juzgarán por ello) por lo que posiblemente intente manipular la opinión que se pueda crear de mí. La apariencia de sinceridad puede serlo o puede ser la sinceridad de un personaje que no soy yo.

    ¿Quién sabe si en realidad no estoy orgulloso de ser ese monstruo? Y aunque ahora te digo que no lo estoy.

    No sé si esa foto tiene que ver con góndolas, la encontré en internet hace tiempo, estaba guardada en un rincón del Gran archivo, así que es posible que no te equivoques.

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  4. Tranquilo, lo tuyo es un mal bastante común.
    Todos somos buenos, malos, fieles, infieles, tiernos, dañinos...depende del momento, el lugar, la situación y la compañía.
    Ah y los que dicen lo contrario, mienten.

    Besos.

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  5. Si, yo creo como Princesa que todos estamos compuestos de muchos defectos y unas cuantas virtudes...también se es un poco lo que uno quiere ser; tu quieres ser un monstruo? pues ánimo, si sigues diciendotelo, lo acabarás siendo...

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  6. Princesa, "todos mienten menos yo" ¿era así la paradoja? No nos vamos a adentrar en lo que es cierto y lo que es verdad a medias, lo que es mentira, lo que es traición. Tienes razón. Todos somos todo un poco.

    Me gustaría que todo te saliera bien.

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  7. Pilar, yo todos los días me miro al espejo y pienso que cada día que pasa me queda menos para encontrar el antídoto, si sigo diciéndomelo probablemente lo acabaré encontrando.

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  8. No es una ciencia exacta...y por cierto, funciona mejor cuando el pensamiento es negativo, luego seguramente serás un monstruo antes que encontrarás el antídoto.

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  9. Mierda! Ya sabía yo que lo había hecho al revés.

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  11. Hola, ¿es aquí donde el monstruo?
    Vengo a darle la dirección de cierto jugador de la selección de Suiza...

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  12. Molaría tener un océano infinito en el que esconderse...

    Más que nada porque el infinito tiene toda la pinta de ser la pera de grande, no?

    Muxu bat

    P.D. ¿Seguro, pero seguro que quieres encontrar el antídoto?

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  13. Nadie es bueno o malo. Todos tenemos nuestros momentos, relajate.

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  14. Pola, yo echo de menos a Luis Aragonés, qué tío, lo que me reía con él y encima ganábamos. Al pobre del Bosque, como no pase de cuartos, lo van a extraditar a collejas.

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  15. Kaoki, yo quiero encontrar el antídoto pero alguien me lo ha escondido en el infinito océano. Snif.

    Muxu bat también (sea lo que sea)

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  16. B.B. A mí tener que relajarme me pone muy nervioso.

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  17. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  18. Jo, lo siento. Pegué sin querer una cosa que tenía en el ratón y me quedó un sinsentido de comentario así que vuelvo a decir que...

    No me creo que seas un monstruo, obedeciendo como niña buena a lo que me dijiste el primer día que vine a verte...

    Además si fueses un monstruo no te preocuparía tanto haberla herido el otro día, por ejemplo. Sabes? Lo que escribimos dice mucho de nosotros, y tú, como todos, entre líneas dices mucho más de tí mismo de lo que piensas.
    Que lo sepas.

    Por cierto, lo de Luis Aragonés ha estado de diez. Ese sí que es un monstruo y no tú :)
    A mí me da un poco de penina de Leoncio León, con esa carilla de triste que tiene, ande vá.
    Ya nos veo de vuelta en cuartos, pa casa otra vez con al rabo entre las piernas (es una metáfora, aclaro). Lo mismo de siempre, vamos, pa que cambiar. Somos unos gafancios, bah.

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  19. Elenaaaaa!!!! Es el rabo entre las patas. Me parece a mí que el rabo entre las piernas es otra cosa.

    No te fíes de los monstruos, los hay que tienen un aspecto feo y son buenos (Quasimodo), los hay que tienen un aspecto normal y... (ahora no se me ocurre nadie).

    Besos.

    Podemos!

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